Anouk:
Josh va hacia la puerta, muy oportuno su amigo y un poco gilipollas me atrevería a decir.
¿Cuál será la sorpresa? Estoy nerviosa... Mientras él se duchaba en "MI baño", dios mío sólo con pensarlo se me eriza la piel, ha estado tan cerca... y yo he estado a punto de...
-Vale Anouk, para de pensar en eso-me digo.
La verdad es que Josh tiene mucha paciencia conmigo, yo si fuera él me hubiera dejado.
Acabo de oír a Josh abriendo la puerta, miles de regalos pasan por mi mente, ¿cual habrá elegido?
Un sonido raro entra por mis oídos. Decido acercarme en silencio, a ver qué pasa, que regalo más extraño debe ser.
Bajo las escaleras con cuidado, parece que Josh está hablando con alguien o no... Hay dos personas, de eso estoy segura, afino el oído en el borde del último peldaño de las escaleras.
-Y ahora ven a matarme si puedes-escucho muy bajito.
No puede ser, una persona me viene a la mente de inmediato.
Voy rápido hacia la puerta.
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAH!-grito al verle.
Héctor se gira y me mira.
-Claro, me olvidaba de ti-dice.
Me quedo petrificada, otra vez no, por favor.
-Anouk llama a la policia-intenta gritarme Josh.
Le veo sangrando, él no se merece esto...
-Ah, ah, ah-Héctor le apunta con la navaja-No vas a hacerlo.
Empieza a correr hacia mi. Subo lo más rápido que puedo las escaleras, pero no soy todo lo veloz que me gustaría.
-¿Qué quieres?-pregunto a voces.
-Todo lo que quiero te lo voy a quitar, primero a Josh, que ya está hecho, y luego otra cosa-contesta muy tranquilo.
Empieza a correr escaleras arriba, detrás de mi. Grito todo lo fuerte que puedo buscando la ayuda de alguien. Héctor me tira a la cama de mi habitación, yo le doy con el talón en la cara, cosa que empeora aún más el ánimo que tiene Héctor ahora. Consigo levantarme en un despiste del chico de mis pesadillas, por desgracia, antes de que me de cuenta vuelvo a tenerle encima.
Grito más fuerte que la vez anterior, sin más respuesta que el gesto de Héctor. Con una medio sonrisa en los labios echa mano de la hebilla de su cinturón.
-¡No, no, por favor no!-vuelvo a gritar.
Acaba de desabrocharse el cinturón.
Intento levantarme de nuevo, Héctor me golpea tan fuerte en la cabeza que hace que pierda el sentido unos segundos. Para cuando lo recupero ya tiene los pantalones totalmente bajados.
Héctor se abalanza sobre mi y me coge las piernas, yo no paro de moverme, no puedo rendirme.
Con mi resignación a darme por vencida se que lo único que recibo son golpes, pero sigo igual.
Héctor me da un golpe en el estómago que me hace perder la respiración por lo que, en esos segundos de debilidad, vuelve a intentar abrirme de piernas.
En ese momento veo llegar a Josh, con una mano tapando su herida, aún sangrando y la otra sujetando un cinturón.
Corre hacia nosotros, levanta el brazo del cinturón y estampa la hebilla en el ojo derecho de Héctor haciendo que me salpiquen en la cara pequeñas gotitas de su sangre.
No puedo evitar sentirme bien al verle sangrando.
Héctor se gira hacia Josh.
-¿Has tenido poco?
-No lo suficiente.
Veo como Héctor saca la navaja del bolsillo de su pantalón. Confío en Josh, pero no le veo con posibilidades... Temo lo peor.
Voy hacia Héctor, por detrás.
-Anouk vete-dice Josh.
Eso me detiene.
-¿¡Cómo que me vaya!?-grito-¿Y tú qué?
-Yo estaré bien.
No lo estará.
-Pero si estás sangrando.
Josh me mira fíjamente.
-Que te largues-grita finalmente.
Le hago caso, tengo que pedir ayuda.
¿Dónde coño estás, Pedro?, pregunto al aire.
Oigo los golpes de arriba, cojo el teléfono y marco el número de mi hermano mientras salgo corriendo escaleras abajo en busca de algún tipo de ayuda.
-Anouk, ¿qué pasa? ¿A que no sabes...
-Cállate-le grito-ven a casa, rápido, está Héctor, ¡corre joder!
-Ya estamos aquí.
Veo acercarse corriendo dos personas desde el final de la calle. Son mi hermano e Iker, el capullo que le ha entretenido.
-¡Vamos, joder!-grito.
Subimos corriendo los tres.
-Anouk, quédate fuera-dice mi hermano-llama a la policía.
Entran en mi casa corriendo y yo llamo a la policía lo más rápido que puedo, me tiemblan los dedos, al igual que todas las demás partes de mi cuerpo.
-Emergencias, ¿cuál es su problema?
Empiezo a llorar, no aguanto la presión, pienso en Josh, en como estará, si estará... Con este último pensamiento las lágrimas caen con más fuerza.
-Por favor, vengan a...-doy la dirección de mi casa-rápido, ha entrado un chico, y...
-Vamos para allá.
Después de esta frase, una fuerza me empuja hacia el suelo, no puedo parar de llorar, no quiero subir. Si que quiero,necesito ver a Josh...
Josh:
Voy hacia la puerta. Ahora me tocará explicarle a Hugo que es tonto. Sonrío, abro la puerta y la sonrisa se me borra de golpe al tiempo que siento un pinchazo en el estómago. Héctor. ¿Cómo mierdas ha llegado hasta ahí? Miro hacia abajo, acaba de clavarme una navaja. Veo como la camiseta del hermano de Anouk empieza a teñirse de rojo. Se acerca a mi oído y susurra:
-Y ahora ven a matarme si puedes.
Me duele, retira la navaja de un golpe, me duele muchísimo. No me tengo en pie, caigo al suelo. Oigo las pisadas de Anouk bajando las escaleras.
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAH!
Héctor se gira y la mira.
-Claro, me olvidaba de ti.
Saco mis últimas fuerzas. -Anouk llama a la policía.
-Ah, ah, ah. - Héctor me apunta con la navaja. - No vas a hacerlo. - Y empieza a subir las escaleras hacia ella.
-¿Qué quieres?
-Todo lo que quiero te lo voy a quitar, primero a Josh, que ya está hecho, y luego otra cosa.
Empieza a correr escaleras arriba, Anouk huye. Oigo como grita y como alguien cae en una cama.Intento levantarme, pero no lo consigo. Noto como pierdo algo de visión, pero los gritos de Anouk me mantienen despierto.
-¡No, no, por favor no!
Y un cinturón que se desabrocha. No puedo más, aprieto fuerte la herida, apoyándome con la pared consigo levantarme y empiezo a subir las escaleras. Me quito también el cinturón y hago con el un látigo. Llego a la habitación y veo a Héctor con los pantalones bajados intentando abrir las piernas de Anouk. La rabia me invade. Hijo de la grandísima puta. Suelto la herida, no siento dolor, no siento como la sangre sigue fluyendo, solo odio. Me acerco corriendo y ¡ZAS! La hebilla del cinturón le reestalla en la cara, ojo derecho, empieza a sangrar.
Héctor se gira.
-¿Has tenido poco?
-No lo suficiente.
No puede abrir el ojo, eso me da algo de ventaja. Saca la navaja del bolsillo del pantalón. Navaja contra cinturón, creo que no tengo las de ganar, da igual, tengo que sacar a Anouk de allí.
-Anouk vete.
-¿¡Cómo que me vaya!? ¿Y tú qué?
-Yo estaré bien.
-Pero si estás sangrando.
Miro a Anouk fijamente.
-Que te largues.
Por fin me hace caso y sale corriendo. Héctor vuelve a hablar.
-¡Qué bonito! Me ha dado hasta asco.
Vuelvo a lanzarle la hebilla a la cara, esta vez le doy en la oreja, que también empieza a sangrar.
-Eres muy pesado ¿Por qué no dejas que Anouk y yo estemos juntos?
Me ha clavado una navaja, ha intentado violar a mi novia, y encima quiere quitármela. No necesito más motivos. Suelto el cinturón y me tiro hacia él tan solo con mis puños. El se ríe, suelta la navaja y hace lo mismo. Empiezo a intentar pegarle en la cara, él para los puños, primero, segundo, tercero directo, desde abajo, intentando destrozarle la nariz como había visto en One million dollar baby el retrocede y se lleva las manos a la nariz. No me paro, vuelvo a cargar contra él, de nuevo a la cara. Él esquiva los dos y empieza a pegarme en el estómago, justo en la zona donde me había clavado la navaja momentos antes, no consigo defenderme. Cada golpe es un dolor extremo, no os hacéis a la idea. Caigo al suelo, la vista empieza a nublarse de nuevo. Héctor me da patadas de pie.
-No vas a volver a entrometerte.
Va hacia la navaja. Pffff ¿Quién me iba a decir que iba a acabar así?
-Lo voy a disfrutar.
Hijo de puta. Al menos he conseguido salvar a Anouk. Héctor recoge la navaja y me mira. Todo se está poniendo negro...
De repente veo como otra figura irrumpe en la habitación corriendo y tira a Héctor al suelo. Cierro los ojos. Oigo puñetazos y patadas y gritos de Héctor. Una voz que me es extrañamente familiar grita.
-Y como le vuelvas a poner la mano encima estás muerto.
Estoy a salvo, pero ahora tengo sueño, mucho, mucho sueño.
En este capítulo habla Josh, por lo tanto está escrito solo por @eduventax él también tiene un blog: http://www.internetauneslibre.blogspot.com
En este capítulo habla Josh, por lo tanto está escrito solo por @eduventax él también tiene un blog: http://www.internetauneslibre.blogspot.com
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