...
Vamos a casa.
-Por fin solos-dice Josh.
-Por fin solos.
-Te amo.
-Sie.
Disfrutamos cada uno del otro, del silencio juntos, las caricias, miradas y sonrisas.
Josh me despierta a la mañana siguiente.
-Anouk, voy a trabajar princesa, se buena-dice-por cierto, la asistenta va a venir en una hora, tiene llaves. Yo vendré a comer contigo y hago yo la comida.
-Vale-contesto estirándome-que se te haga cortito.
Me besa en la frente y se va.
Al cabo de una media hora me levanto de la cama, la dejo hecha, es la costumbre.
Bajo a desayunar y veo que son las 12:30. Desayuno cereales y un yogur.
Voy a ver la tele, no hay nada que me distraiga lo suficiente del aburrimiento.
Pienso en ir a ver a Josh... No recuerdo como se iba.
Decido ir a por la comida a algún restaurante cercano. Josh me dijo donde guardaba dinero para emergencias.
Lo cojo y voy por la calle, buscando un restaurante para comprar la comida, no encuentro nada.
Veo un chico moreno, alto delante mío, parece que sabe bien como ir por la ciudad, decido preguntarle.
-Perdona-le doy un toque en el hombro para que me mire-¿sabes...?
Es Taylor Lautner.
-¡Anda! La chica de Josh-dice sonriendo.
-Anouk-digo.
-Sí, ¿cómo no me iba a acordar de un nombre tan raro?-dice.
-¿Gracias?-no se si lo ha dicho con mala intención.
-¿De nada?
Me está empezando a enfadar.
-Quería preguntarte si hay un restaurante cerca para llevar la comida de ahí a casa.
-Sí... Pero está bastante lejos, si quieres te acompaño.
-Me harías un favor-digo con una medio sonrisa.
Por el camino vamos hablando hasta que llegamos a un restaurante chino.
-Es aquí-dice-con esta me debes dos.
-¿Dos?
-La de ayer, me dejaste mal delante de la gente y la de hoy.
-Yo no te dejé mal-digo-fue mi amiga.
-¿Y eso de "ahora sí"?-pregunta.
-Una tontería...
-Bueno, como me debes dos me lo cuentas ahora en el Starbucks...
-Vale-digo a regañadientes por no parecer desagradable.
Salgo con un montón de comida.
-Primero iré a casa a dejarlo todo para no ir con esto a todas partes.
-Perfecto, creo que cerca de tu casa hay uno.
Lo dejo y vamos.
Me pido un café con nata y hablamos.
-Explícame lo de ahora sí.
-Emm...-no se qué decir-pues que digamos que me medio gustabas en las películas y tal.
Se ríe.
-¿Ahora no te gusto?
-No-contesto seca-estoy con Josh.
-Pero... Tienes ojos y corazón, puedo gustarte físicamente aunque sea.
Cruzo los brazos y me echo para atrás.
-Lo siento pero no...
Empieza a ser pesado.
-Bueno... Quizá te haga cambiar de opinión.
-Me tengo que ir-digo borde.
-Te acompaño-dice levantándose.
-No hace falta, gracias.
Voy a casa, todavía no ha llegado Josh.
Pongo la mesa y sirvo la comida.
Suenan unas llaves abriendo la puerta, es Josh. Voy corriendo hacia él y le abrazo, me le como a besos.
-Tengo una sorpresa para ti-digo.
-¿Qué será? Huele bien.
-He ido a por la comida-contesto sonriendo orgullosa.
Nos sentamos a comer.
-¿Sola? Te dije que no fueras sola, Anouk, no vuelvas a irte sola sin conocer bien esto...
-No he ido sola en realidad... He ido con Taylor Lautner.
Le cuento todo.
-No me gusta ese tío, no me cae bien-dice.
-Es un poco pesado, la verdad.
-¿Te gusta?
Le doy un beso.
-Me gustas tú. Bueno no, es más que eso.
-Ya... Pero...
-Sin peros-le corto-solo tengo ojos para ti.
Me besa.
-¿Quieres venir ahora conmigo?-me pregunta.
-Por supuesto que sí, yo sola aquí me aburro.
-Pues hecho, en media hora salimos.
-Me voy a vestir-le doy un beso en la frente y subo.
Me pongo una camiseta gris ancha, unos vaqueros rotos y unas zapatillas azules a juego con el bolso y las gafas de sol.
-Estás preciosa-dice.
-Y tú-contesto sonrojada.
De camino vamos de la mano, me doy cuenta de que hay paparazzis porque veo los flashes.
-Nos están haciendo fotos-susurro a Josh.
-Es normal... Somos famosos.
-Yo no...-digo, no quiero creérmelo.
Se para en seco, me mira y me besa con pasión.
-Se llama Anouk-dice a un paparazzi que había visto-apunta ese nombre porque es el más bonito que me oirás decir.
-Josh... ¿Te repito que no quiero ser famosa?
-Ahora lo eres y lo ibas a ser cuando sacases el libro.
Sí, estoy escribiendo un libro de ciencia ficción y aventuras.
-Pero quedaba mucho para que sacasen el libro a la venta.
-No tanto, envié lo que tenías en el ordenador-dice sonriendo.
-¿Qué?
Un escalofrío recorre mi cuerpo, es mi sueño, ser escritora.
-¿Qué han dicho?-digo.
-Que cuando lo tengas terminado se lo mandes así que mañana como no trabajo vamos a por un ordenador.
-Cada día te quiero más.
-Lo se. ¿Sabes tú que cada día encuentro más sentido a la palabra amor gracias a ti?
-Exagerado-digo mirándole de reojo.
-Sie-contesta.
Ya hemos llegado, entramos y a mi me sientan en una silla un poco apartada de todos.
Se me pone una niñita rubia al lado, no me lo puedo creer, es Willow Shields, es Prim.
-Hola-dice.
-Hola, yo te conozco-digo sonriendo-eres Willow.
-Sí-ríe-y tú Anouk, me gusta tu nombre.
-Gracias, es lobo en ruso-contesto.
-Ah... Ahora entiendo todo...
-¿Qué?-no se de que habla.
-Eres la loba de Josh, ¿no?
No se qué contestar, me ha dejado sin palabras.
-No pasa nada, me dijo que tenía una novia loba-sonríe-ahora lo entiendo.
-Vaya... No se qué decir.
-Pues yo te digo que es un pesado, todo el día hablaba de ti, siempre diciendo: "¿por qué no la dije que viniera?", "debí habérselo dicho"... Menos mal que has venido-se ríe.
-Sí, menos mal-me ha dejado un poco cortada.
-Me caes bien, Anouk. Te doy mi visto bueno.
-Gracias Willow-sonrío-tú también me has caído bien.
Se va a grabar.
Ahora están a punto de besarse Katniss y Peeta en la escena de la nieve, creía que la habrían rodado ya, como el otro día estaban haciendo la de los latigazos...
"Un momento, le va a besar. No le puede besar. ¿Qué hace? Los besos en el cine no se dan de verdad. ¡No beses a mi novio!", todo eso es lo que pienso antes de meter la pata.
-¡No!-digo.
"Mierda"... Todos se giran para mirarme y se ríen. Yo miro para atrás intentando disimular que yo no he sido la que lo ha dicho. Pero no se por qué me da que no se lo ha creído nadie, menos mal que cada uno va a lo suyo...
Ya ha terminado Josh de trabajar.
-Vamos-dice-estoy muy cansado.
Me da un beso y vamos los dos hacia casa.
-Que graciosa eres-dice.
-¿Por?-pregunto.
-Por lo de ¡no! Ha estado chulo.
-¿A sí? Pues a mi no me ha hecho gracia verte comiéndole la boca a Jennifer...-digo un poco borde.
-Es trabajo y también es duro para mi.
-Lo dudo-digo.
Ahora estoy enfadada por su culpa, si no me lo hubiera recordado...
-Anouk... Cuando tengo que hacer una escena de un beso me cuesta. Tengo que hacerlo natural.
-Ya ya, lo he visto, te ha quedado muy bonito las tres veces que lo has repetido-contesto.
-Yo pienso que eres tú, sino no me sale, Anouk, lo sabes.
-Ah...
Eso cambia un poco las cosas.
-Cuando tengo que hacer algo así te imagino ahí y me sale solo, por eso estaba tan mal cuando rompimos, porque si te imaginaba se me daba peor.
-Así que... Soy tu inspiración-digo sonriendo.
-Eres más que eso... He comprobado que sin ti no soy nada, me has cambiado hasta un punto que sin ti ya no se hacer lo único que se me da bien.
-Anda tonto... Se te dan bien muchas cosas.
Le beso.
-Pero todo lo hago contigo. Si me dejas soy inútil.
Ya hemos llegado a casa. Él va a abrir pero antes de que pueda hacerlo le beso, le quito la camiseta y pongo sus manos sobre mis glúteos.
-Vamos por el otro lado.
Vamos hacia la piscina.
-Espera, voy a por los bañadores-dice.
-¿Para qué?-pregunto.
Me voy quitando la camiseta lentamente, los zapatos, me bajo la cremallera del pantalón... Él se acerca, me besa.
-Te amo-dice quitándose la camiseta-eres perfecta-sigue mientras me da un beso-eres increíble-dice quitándose las zapatillas.
Me vuelve a besar. Le bajo los pantalones, él hace lo mismo.
Me quita el sujetador mientras me besa.
Nos quitamos lo poco que queda de ropa y nos tiramos a la piscina.
-Mañana tengo una sorpresa para ti-dice entre besos, caricias y miradas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario